martes, 2 de noviembre de 2010

Allí arriba

Esta noche te he visto en el cielo y te he hecho mía. Seguro que no lo eres, pero la mentira me hace feliz. No se si eres planeta, estrella o tienes de nombre un EAN 13, pero no me importa. Desde hoy eres mía. Quizá mañana no te reconozca, pero me mirarás y lo sabré. Son cosas nuestras.

Me pregunto si eres feliz por allí arriba, tan solita. Si no tienes a nadie que te haga compañía, si es que realmente la necesitas. Quizá estás tan ocupada siendo de tanta gente que apenas te queda tiempo para ti. Debe ser duro, pero eres fuerte. A pesar de estar tan lejos muchos te llevamos dentro, nos consuelas, nos vuelves ligeros. Nos haces mas humanos, aunque no se como te tomarás esto último. Teóricamente es un piropo, por si dudas.

Tintineas con dulzura, nos iluminas a pesar de ser tan pequeña, nos guías a pesar de estar quieta. Y lo haces sin pedir nada a cambio, casi exigiendo que no te demos las gracias.

Estaríamos perdidos sin ti. Lo sabes, y pudiendo ser arisca y orgullosa no lo eres, estás ahí para cuando te necesitamos, incluso cuando otros más cercanos y envidiosos nos ofrecen su falso brillo y su mentiroso calor. Justo cuando se envilece y apaga, apareces tu, tan siempre en tu sitio, tan limpia, tan humilde... tan tu.

Hoy te he hecho mía. Simplemente, quería que lo supieras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario